No es un secreto que siempre me ha gustado viajar, desde chico con las vacaciones familiares; sin dudas con un importante impulso cuando obtuve mi primer licencia de conducir y le pedía prestado el auto a mi papá… aún recuerdo la primera vez que me fui “lejos” sin avisarle, esa fue la prueba de fuego, pero eso es para otra historia, hoy es sobre “el gran viaje”.

Desde hace algunos años estoy planificando con mucho entusiasmo mi primer viaje internacional (e intercontinental); la idea es ir a Europa (Italia, España, Francia, por nombrar algunos), a conocer lo que es a rasgos generales, el origen de la mayoría de los argentinos (y muchos latinoamericanos de países vecinos), mayormente descendientes de españoles e italianos.

Resulta llamativo darse cuenta que muchas expresiones, palabras y costumbres no son tan Argentinas como pensamos, palabras como birra (cerveza en italiano), laburo (que viene del italiano, laboro), o costumbres como “El ratón Pérez” de España (1894), también puede atribuirse su origen a Francia con “La Bonne Petite Souris” (o El pequeño y noble ratón) de 1697. Esto sólo por nombrar algunas cosas (muy pocas), queda claro que Europa es el origen de “Todo” (o casi) y es por eso que quiero ir a conocer el lugar, las costumbres, los orígenes y probablemente entender mucho más las cosas, no sólo de Europa sino de Argentina (y países de la región).

Alrededor de 2018 comencé a planificar el viaje, buscar lugares, averiguar costos, buscar fechas, y ahorrar el dinero necesario… pero vino el 2020 y la pandemia puso todo en duda, el mundo se freno de golpe, el turismo se frenó.

Elegir los destinos y hacer todas las averiguaciones es, al menos para mi, un poco abrumador… son demasiadas cosas a considerar y siempre se nos puede pasar algo por alto. Por suerte las restricciones de circulación y ciertos protocolos han quedado en el pasado, ¡una cosa menos de que preocuparse! (que si barbijo, alcohol, etc…. acá o allá, en este país o aquel otro…. es estresante estar pendiente de todo eso).

Todo se pausó por un tiempo, hasta ahora, y es por esto que después de años de planificación (no se si la necesaria) voy a emprender este viaje, que para mi es “el gran viaje”, aunque espero que no sea el último gran viaje.

Es cierto que afrontar algo así, viviendo en Argentina se dificulta un poco por el tema económico, pero no es imposible.

Mientras escribo esto, repaso mentalmente todos los problemas que he pasado, las dificultades, años de ahorros, pero ya está, el pasaje está pago, y la fecha fijada (¿Cuando?… prefiero no decirlo, se darán cuanta cuando vaya subiendo contenido), ahora a esperar y disfrutar.

Iré compartiendo los preparativos y el trayecto con todos ustedes, ¡acompañenme en este viaje!